“La historia comienza con Morales desenterrando una caja donde ha guardado algunas fotografías. La abre, pero le explica a su amigo Concho que desearía haber tomado aún más fotos en aquellos tiempos porque su memoria ya no es como solía ser. Mientras revisan las fotos antiguas, Morales sale a comprar comida. En su camino a la panadería, se da cuenta de que el barrio ha sido gentrificado. Encuentra a una familia que habla inglés y escucha música country, y el cajero de la panadería toma su pedido en inglés. Ah, y ya no aceptan efectivo”, reseña la revista Billboard.
De regreso a Casa, Morales se encuentra melancólico y al sentarse junto a Concho en el porche de la casa, ven pasar un automóvil rojo del que sale un sonido que representa a su isla, Puerto Rico.